Durante las fiestas de fin de año, las estadísticas de accidentes suelen aumentar. Uno de los mayores villanos es el consumo de bebidas alcohólicas antes de conducir. El alcohol afecta la capacidad de coordinación, y disminuye los reflejos, la concentración y la capacidad de tomar decisiones rápidas en situaciones inesperadas. En otras palabras, conducir después de beber aumenta el riesgo de accidentes de tránsito.

Otra causa de accidentes son el sueño y el cansancio de los conductores. Para reducir los riesgos algunos cuidados son necesarios, ya que conducir con sueño es tan arriesgado como conducir vehículos después de haber ingerido bebida alcohólica.

Recuerde que al conducir con sueño o después de ingerir bebidas alcohólicas, usted no estará poniendo apenas su vida en riesgo, pero también la de muchas otras personas

Su vida es su mayor bien. No olvide: si beber o está cansado no conduzca.

Algunos consejos para quien quiere viajar:

Si beber, no conduzca;
Descanse antes de tomar la carretera. No conduzca cansado o con sueño;
Nunca utilice el teléfono móvil si está al volante;
No deje de usar el cinturón de seguridad, incluso en el asiento trasero;
Transporte de niños en los equipos adecuados de acuerdo con las edades;
Mantenga siempre la distancia de seguridad del vehículo delantero para evitar choques y colisiones;
No encienda el intermitente con el vehículo en movimiento. Esto puede confundir a otros conductores y causar un accidente.